Honduras atraviesa un difícil momento en el aspecto social y político debido al derrocamiento del presidente electo, Manuel Zelaya, por parte de los militares que tomaron el mando del país.
El fútbol es una actividad social que alberga el interés de muchas personas, por lo que la clasificación de su selección al Mundial ayudó a que el tema central de conversación concentre plenamente el foco en la pelota redonda.
El tercer puesto en las eliminatorias de la CONCACAF le dio el boleto directo a Sudáfrica al conjunto hondureño. Con 17 goles a favor y 11 recibidos, dio la sorpresa y se quedó con la última plaza directa.
El próximo año será su segunda participación en la cita mundialista, ya que participó en España 1982 (eliminada en primera ronda). Las esperanzas de realizar un buen papel estarán firmes, al igual que las de retornar a la democracia.
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